''La responsabilidad de no callar ante el relato agrario''

Entidades de base de la Federación Agraria Argentina, reunidas en Chabás, emitieron un comunicado para expresar su descontento con la situación que atraviesan los pequeños agricultores.

OMARPRINCIPE2Omar Príncipe, expresidente de la FAA.

"La Federación Agraria Argentina (FAA), gestada tras el Grito de Alcorta, no nació para contemplar en silencio cómo celebran los millones de toneladas sobre el certificado de defunción de miles de chacareros.

Este miércoles 31 de julio, entidades de base de la FAA, de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires, nos convocamos en la localidad de Chabás, ante la crítica situación que atravesamos los pequeños agricultores y de la que nada se dice. No convalidamos la pasividad gremial y el posicionamiento de la actual conducción ajeno a las necesidades y propuestas de los pequeños y medianos chacareros y reivindicamos los principios históricos de la institución.

Este año se conocieron los datos del Censo Nacional Agropecuario 2018 y arroja que somos 40 mil productores menos que en el anterior y que los que desaparecen son los más chicos. En esta situación y de cara a una elección presidencial, el silencio y la ambigüedad a la hora de plantear las propuestas nos condena al empobrecimiento, expulsa, extingue a los de nuestra especie, que seguimos resistiendo el avance del agronegocio especulativo e impiadoso sobre nuestras tierras y localidades.

¿Por qué nos extinguimos? Porque este modelo agropecuario, de escala, que prioriza los números de la exportación y descarta a las personas, se sustenta sobre la idea de que se puede prescindir de los chacareros, los agricultores familiares, los campesinos, y desplazarlos para que avancen y se consoliden unas pocas megaempresas agropecuarias que acaparan las cadenas productivas agroalimentarias, en desmedro también del sistema cooperativo.

Denunciamos que al segmento de agricultores que ha representado históricamente nuestra entidad nos resulta inviable seguir trabajando endeudados, con una tasa de interés de 70 % y un Banco Nación que nos ha olvidado como sujeto de crédito; con el precio de las tarifas, del gas oil, de los fletes y de los insumos agropecuarios dolarizado; con mínimos no imponibles y escalas tributarias que por falta de actualización nos condenan a pagar como si fuésemos grandes productores y por tanto, paradójicamente, terminamos subsidiando a los de mayor escala (con impuesto a las ganancias y retenciones sin segmentar); con falta de transparencia en las cadenas de comercialización y distorsión de precios entre lo que recibe el productor y lo que paga el consumidor; falta de mecanismos para sostener a los chacareros en las últimas situaciones de emergencia y desastre agropecuario; sin precio mínimo y sostén para las economías regionales; falta de seguridad e infraestructura en los territorios rurales en los que vivimos y producimos; el acecho constante de laboratorios y compañías semilleras multinacionales que no respetan nuestro derecho al uso propio y gratuito de semillas y condicionan la soberanía nacional; la falta de regulación adecuada y la competencia voraz por la tierra y los arrendamientos, que nos asfixia y expulsa.

Como lo demostró el Censo Nacional Agropecuario, la concentración en “el campo” es feroz y a pesar del relato agrario con el que nos quieren confundir, queda claro que no todo el campo es lo mismo y por tanto, los pequeños y medianos chacareros somos agricultores familiares que necesitamos políticas públicas diferenciadas que nos aseguren igualdad de oportunidades para seguir produciendo alimentos frente al avance del agronegocio, que nos condena a la extinción.

En las bases fundacionales de la Federación Agraria Argentina, que se plasmaron tras el Grito de Alcorta para la defensa de la familia chacarera, se encuentran los principios que guían nuestras reivindicaciones y que en cada momento histórico han arrojado luz sobre cuáles son las políticas públicas que debemos defender para seguir siendo chacareros."

Etiquetas: Federación Agraria Argentina